GREEN BAY, Wisconsin— Elon Musk arrancó los aplausos de sus partidarios en una reunión municipal celebrada el 30 de marzo en la que repartió 2 millones de dólares para publicitar la carrera de un candidato respaldado por los republicanos a la Corte Suprema del estado y dijo: «Creo que esto será importante para el futuro de la civilización».
Planteó la carrera en términos históricos, instando a unos 1500 asistentes dentro del centro de convenciones de la ciudad a movilizar a amigos y familiares para que voten el 1 de abril.
«Lo que va a ocurrir el martes es una votación para decidir qué partido controla la Cámara de Representantes de Estados Unidos», dijo Musk. «Y cualquiera que sea el partido que controle la Cámara, en un grado significativo, controla el país, que luego dirige el curso de la civilización occidental».
La corte tiene ahora una mayoría liberal de 4-3, con uno de los jueces conservadores considerado un voto decisivo. Si esa mayoría permanece intacta, según Musk, los mapas de los distritos del Congreso se redibujarán a favor de los demócratas, alterando el equilibrio de poder en el Congreso.
Fuera de la sala de convenciones, los manifestantes protestaron contra lo que consideraron un intento de comprar un puesto en la Corte Suprema.
Los candidatos para un mandato de 10 años son Brad Schimel, juez del condado de Waukesha, apoyado por Musk y los republicanos; y Susan Crawford, juez de circuito del condado de Dane, apoyada por el partido demócrata del estado.
La carrera se convirtió en la contienda judicial más cara de la historia del estado. Hasta el 13 de marzo, Crawford gastó más de 21 millones de dólares, frente a los 10 millones de Schimel, según datos de Transparency USA.
Los comités de acción política vinculados a Musk gastaron más de 14 millones de dólares en apoyo de la candidatura de Schimel, aunque eso es sólo una fracción de los más de 80 millones de dólares en fondos externos gastados en la carrera hasta ahora, según los datos recogidos por Ballotopedia.
«Elon Musk está intentando comprar Wisconsin y nosotros queremos demostrarle que no estamos en venta», declaró Kristin Lyerly, de 54 años y residente en Green Bay, al diario The Epoch Times. Lyerly ayudó a organizar la protesta en la acera contra Musk, que la policía estimó en unas 300 personas antes de que comenzara el acto.
Algunos manifestantes estaban más preocupados por la labor de Musk al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental y decían que las reducciones de plantilla socavaban el buen trabajo que realizaban los funcionarios.
Otros protestaban por lo que consideraban un privilegio injusto para los ricos.
«Hemos sido peones de multimillonarios desde que llegó aquí el Mayflower», dijo a The Epoch Times Valerie Horn, de 41 años y residente en Waterford. «Nos merecemos una sociedad más igualitaria».
Dentro de la sala, Navin Jaruqumillia, de 53 años, de Madison, estaba desconcertado por las protestas contra Musk. «No tengo ni idea de cuál es la obsesión con Elon Musk», dijo Jaruqumillia a The Epoch Times.
«El hecho es que el 77 por ciento del... dinero de Susan Crawford procedía de donantes de fuera del estado», dijo Jaruqumillia.
Jaruqumillia es secretario del Partido Republicano del condado de Dane, en Wisconsin.
La organizadora de protestas Kristin Lyerly aparece en el exterior de una reunión del ayuntamiento en la que participaba Elon Musk en Green Bay, Wisconsin, el 30 de marzo de 2025. (Lawrence Wilson/The Epoch Times)Algunos asistentes aprobaron el trabajo de Musk sobre la eficiencia gubernamental.
«Creo que lo que está haciendo Elon Musk es muy admirable: sacar a la luz el despilfarro y el fraude», dijo a The Epoch Times Kevin Magee, de 57 años y residente en Gillett.
Ramona Marquardt, de 34 años y residente en Green Bay, dijo que hacía poco que se interesaba por la política, pero que le impresionó el trabajo de Musk con SpaceX y sus valores.
«Muchas de las cosas que están sucediendo en las escuelas en estos días no están en línea con lo que yo creo», dijo a The Epoch Times, Marquardt, que tiene un hijo en segundo grado. Dijo que apreciaba el apoyo de Musk a las posiciones del presidente Donald Trump sobre la educación.
El fiscal general demócrata de Wisconsin, Josh Kaul, demandó a Musk y a su America PAC para bloquear la donación de 2 millones de dólares por considerarla una violación de la ley de Wisconsin.
Musk emitió entonces un comunicado diciendo que el dinero en efectivo era a cambio de dar publicidad a una petición difundida por America PAC en oposición al activismo judicial.
Más tarde, la Corte Suprema de Wisconsin rechazó por unanimidad la petición de Kaul sin hacer comentarios.
Durante el acto, Musk entregó sendos cheques de un millón de dólares a Nicholas Jacobs y Ekaterina Diestler, firmantes de la petición.
Musk también anunció una iniciativa de America PAC para motivar a los asistentes a ir de puerta en puerta publicitando las elecciones y la candidatura de Schimel. Los participantes recibirían 20 dólares por conseguir que posibles votantes posaran para una fotografía sosteniendo una imagen de Schimel.
Tras señalar que los principales mercados de apuestas daban a Crawford como más probable ganador de la contienda, Musk dijo que era necesario un esfuerzo extraordinario.
«Básicamente, vamos a arrastrar el estado», dijo Musk. «Todo el mundo se va a movilizar por todas partes, como locos, durante las próximas 48 horas. Y creo que esto será importante para el futuro de la civilización».
Un cartel de campaña aparece en el interior del Centro de Convenciones KI antes del comienzo de una reunión municipal con Elon Musk en Green Bay, Wisconsin, el 30 de marzo de 2025. (Lawrence Wilson/The Epoch Times)Los observadores electorales coinciden en que esta contienda se reducirá a la participación de los votantes.
Musk estuvo acompañado en el acto por el secretario de Transporte, Sean Duffy, antiguo congresista por Wisconsin y el senador republicano Ron Johnson.
Durante más de una hora, Musk respondió a las preguntas de los asistentes sobre temas que iban desde el uso de la inteligencia artificial en la educación hasta la eficiencia del gobierno, Bitcoin, la Reserva Federal y la Seguridad Social.
Musk, acompañado por el inversor Antonio Gracias, que forma parte del equipo del Departamento de Eficiencia Gubernamental, aprovechó muchas de las preguntas para destacar lo que describió como un nivel alucinante de fraude y despilfarro en el gasto público.
«En realidad sólo intentamos devolver el sentido común al gobierno», dijo Musk. «Vamos a ver si podemos hacerlo un 15 por ciento más eficiente. Y confío en que podamos».
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