El presidente Donald Trump anunció el viernes que la Fuerza Aérea de Estados Unidos le había otorgado a Boeing un contrato para desarrollar el avión de combate secreto de próxima generación de la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Trump dijo que este nuevo avión de combate se denominará F-47.
"Después de una competencia rigurosa y exhaustiva entre algunas de las principales compañías aeroespaciales de Estados Unidos, la Fuerza Aérea va a adjudicar el contrato para la plataforma de dominio aéreo de próxima generación a Boeing", dijo Trump en un anuncio desde la Casa Blanca el 21 de marzo.
El presidente dijo que una versión experimental del avión F-47 de Boeing ha estado volando en secreto durante casi cinco años.
"Y estamos seguros de que supera enormemente las capacidades de cualquier otra nación", dijo.
Los detalles sobre el diseño del avión permanecen en secreto y Trump dijo que no especificaría el precio del programa porque podría dar pistas sobre el tamaño del avión y parte de la tecnología que incluirá.
El programa de Dominio Aéreo de Nueva Generación (NGAD) de la Fuerza Aérea busca construir un nuevo avión de combate, que requiere una aeronave con nuevas y avanzadas capacidades de propulsión y sigilo. La Fuerza Aérea previó una aeronave tripulada avanzada que pueda acoplarse a drones de combate furtivos, en desarrollo paralelo, conocido como el programa de Aviones de Combate Colaborativo. El NGAD ha estado en desarrollo desde al menos 2014, pero ha estado suspendida desde el verano de 2024 en medio de preocupaciones sobre el presupuesto del servicio para nuevos programas de armas.
Como señal de que el NGAD estaba logrando nuevos avances, la Fuerza Aérea anunció a principios de este mes la asignación de designaciones de caza a dos prototipos de drones independientes en desarrollo para el programa de Aviones de Combate Colaborativo. Los prototipos, desarrollados por General Atomics y Anduril Industries, son los primeros drones estadounidenses con designaciones de caza y se prevé que comiencen las pruebas de vuelo este verano.
"Esta es una inversión histórica en el ejército estadounidense, en la base industrial estadounidense, en la industria estadounidense, que ayudará a revivir el espíritu guerrero dentro de nuestro ejército", dijo el secretario de Defensa, Pete Hegseth, al unirse a Trump en la Oficina Oval para el anuncio del contrato.
El anuncio del contrato del viernes significa una gran ayuda para Boeing, que ha enfrentado recientes huelgas laborales y desafíos operativos. La empresa aeroespacial y de defensa ha enfrentado demandas recientes por fallas y fallos en sus aviones comerciales, retrasos en un contrato para la entrega de la próxima serie de aviones de transporte presidencial y problemas en la operación de la nave espacial Boeing Starliner durante una reciente misión espacial.
Esta es una noticia en desarrollo y se actualizará con detalles adicionales.
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