El secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr., anunció el 7 de abril que solicitará a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) que dejen de recomendar la fluoración del agua municipal en todo el país.
Kennedy también dijo que el HHS volverá a convocar al Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos Comunitarios, un panel independiente compuesto por expertos en salud pública y prevención, "para estudiar y hacer una nueva recomendación sobre el flúor".
Kennedy reveló los planes a Associated Press el lunes, durante un evento en Salt Lake City, donde se le unió el administrador de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) Lee Zeldin como parte de una gira de Make America Healthy Again (MAHA).
La EPA dijo el 7 de abril que está revisando "nueva información científica" sobre los posibles riesgos para la salud del flúor en el agua potable. La agencia tiene autoridad para establecer el nivel máximo de fluoración en los sistemas públicos de agua.
Kennedy es un abierto opositor del flúor en el agua, al que calificó de "residuo industrial" y "neurotoxina peligrosa" en la campaña presidencial del año pasado.
El mes pasado, Utah se convirtió en el primer estado en prohibir el flúor en el agua potable pública cuando el gobernador republicano Spencer Cox firmó la legislación. Los sistemas de agua de las comunidades de todo el estado deben dejar de añadir el mineral antes del 7 de mayo.
"Acompañado por legisladores de Utah, Kennedy elogió al estado por emerger como "el líder en hacer que Estados Unidos vuelva a ser saludable" el 7 de abril.
"No tiene sentido tenerlo en nuestro suministro de agua. Y estoy muy, muy orgulloso de este estado por ser el primero en prohibirlo. Y espero que muchos más vengan", dijo Kennedy.
La representante estatal de Utah Stephanie Gricius, republicana y principal patrocinadora del proyecto de ley, dijo que permite a los farmacéuticos recetar flúor a quienes deseen la protección del mineral para sus dientes.
"Creo en la elección individual cuando se trata de qué recetas ponemos en nuestros cuerpos y el flúor está regulado a nivel federal como una receta", dijo Gricius a Reuters el mes pasado. "La fluoración del agua comunitaria y el consentimiento informado, que es fundamental para una buena atención sanitaria, no pueden coexistir".
"La Asociación Dental Americana (ADA), que apoya la fluoración generalizada del agua, escribió en una carta de febrero a Cox que debería vetar el proyecto de ley porque está «en completa oposición" a la misión de la organización.
La ADA dijo que la medida "eliminaría la forma más eficaz, eficiente y equitativa de prevenir las enfermedades dentales".
Los legisladores de Ohio, Carolina del Sur y Florida también propusieron restricciones sobre el agua fluorada.
Aunque generalmente se siguen las recomendaciones de los CDC, los gobiernos estatales y locales determinan si sus comunidades agregarán fluoruro al agua. No puede superar la cantidad máxima establecida por la EPA, que actualmente es de 4 miligramos por litro.
En 2011, la EPA redujo la cantidad de flúor permitida en el agua tras un informe de la Academia Nacional de Ciencias que descubrió que podrían producirse algunos síntomas tiroideos y artríticos por debajo de los límites máximos establecidos en ese momento.
"En cuanto fui nombrado por el presidente Trump como administrador de la EPA, el secretario se puso en contacto conmigo al instante para empezar a hablar de los temas que tanto le apasionan. Y el número uno de esa lista era el flúor", dijo Zeldin.
Lee Zeldin, entonces congresista de Nueva York nominado para jefe de la EPA, habla durante su audiencia de confirmación en el Senado en el Capitolio el 16 de enero de 2025. (Anna Moneymaker/Getty Images)Los funcionarios federales respaldaron la fluoración del agua en 1950 para prevenir la caries dental.
El agua potable es la principal fuente de flúor para los estadounidenses, informó Associated Press. Según datos de los CDC, alrededor de dos tercios de la población estadounidense consume agua potable fluorada.
Zeldin señaló que la EPA estaba explorando estudios científicos sobre los posibles riesgos para la salud del flúor en el agua potable para "informar los pasos futuros de la agencia" sobre las normas nacionales.
"El secretario Kennedy lleva mucho tiempo al frente de este asunto. Su defensa fue fundamental en nuestra decisión de revisar los riesgos de exposición al flúor y estamos comprometidos a trabajar junto a él, utilizando una ciencia sólida a medida que avanzamos en nuestra misión de proteger la salud humana y el medio ambiente", dijo Zeldin el 7 de abril.
Días antes de las elecciones presidenciales de noviembre pasado, Kennedy escribió en una publicación en X que una de las primeras medidas de Trump en el cargo sería aconsejar a los sistemas de agua de EE. UU. que eliminaran el flúor del agua pública.
La semana pasada, la División de Salud Bucodental de los CDC fue eliminada como parte de los recortes generalizados de personal del HHS.
La división se encargaba de promover la seguridad y los beneficios de la fluoración del agua comunitaria.
Grupos médicos y expertos en salud pública, llevan mucho tiempo afirmando que el flúor puede fortalecer los dientes y reducir las caries.
Con el tiempo, los estudios documentaron posibles problemas.
El año pasado, un juez federal de California ordenó a la EPA que revisara los riesgos de añadir flúor al agua potable.
Desde esa sentencia, varias ciudades y pueblos están tomando medidas para poner fin a la fluoración.
El secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr., en el centro, habla durante una conferencia de prensa sobre la nueva prohibición del flúor en Utah, los aditivos alimentarios y la legislación de fondos SNAP en Salt Lake City el 7 de abril de 2025. (Melissa Majchrzak/AP Photo)El 7 de abril, Kennedy citó un estudio realizado el año pasado por el Programa Nacional de Toxicología federal, que encontró una relación entre una mayor exposición al flúor y un menor coeficiente intelectual en los niños. La agencia utilizó estudios que involucraban niveles de flúor que duplicaban el límite recomendado para el agua potable.
Kennedy advirtió que el flúor en el agua también puede causar hipertiroidismo y osteoartritis, entre otras afecciones. Añadir flúor al agua "claramente está haciendo daño" y está socavando la libertad de elección, añadió.
"No deberíamos exigir a los padres que acepten para sus hijos y en sus hogares algo que es esencialmente un medicamento", dijo Kennedy.
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