El presidente ucraniano Volodímir Zelenski dijo el miércoles que al menos 155 soldados chinos luchan junto a las fuerzas rusas mientras Moscú se prepara para lanzar una nueva ofensiva de primavera.
En declaraciones a los periodistas el 9 de abril, Zelenski dijo que la inteligencia ucraniana había obtenido los apellidos, la información de los pasaportes y las asignaciones de servicio de 155 ciudadanos chinos que supuestamente sirven en el ejército ruso. Agregó que "muchos más" pueden estar involucrados a medida que la guerra entra en su cuarto año.
Zelenski no acusó a Beijing de suministrar mano de obra a Moscú. Dijo que las autoridades chinas saben que los reclutadores rusos buscan activamente a ciudadanos chinos en plataformas de redes sociales nacionales.
“Es obvio que estos no son casos aislados, sino trabajo ruso sistemático, en particular, en el territorio y bajo la jurisdicción de China, para reclutar ciudadanos de este país para la guerra”, dijo Zelenski en un comunicado en su canal oficial de Telegram.
Los comentarios surgen tras la captura de dos chinos a principios de esta semana en Donetsk, una región muy disputada en el este de Ucrania que ha estado parcialmente controlada por una república separatista respaldada por Moscú desde 2014. En respuesta, Zelenski dio instrucciones al ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Andrii Sybiha, para que se pusiera en contacto urgentemente con Beijing para obtener aclaraciones.
Sybiha dijo que convocó al encargado de negocios de China para presentar una protesta formal y exigir una explicación.
“Los ciudadanos chinos que luchan como parte del ejército invasor de Rusia en Ucrania ponen en duda la posición declarada de China a favor de la paz y socavan la credibilidad de Beijing como miembro permanente responsable del Consejo de Seguridad de la ONU”, escribió el ministro de Relaciones Exteriores en X.
El 9 de abril, el Ministerio de Asuntos Exteriores de China rechazó las afirmaciones de Zelenski de que ciudadanos chinos luchan junto a las fuerzas rusas, calificándolas de “infundadas”. Al día siguiente, el portavoz del ministerio, Lin Jian, rechazó cualquier sugerencia de participación estatal.
Lin dijo en una conferencia de prensa programada que el régimen siempre pide a sus ciudadanos que eviten involucrarse en conflictos armados o en operaciones militares y que se mantengan alejados de esas zonas.
China, que ha declarado una asociación “sin límites” con Rusia, se presenta como mediador neutral en los esfuerzos por terminar la guerra. Mientras tanto, aparecen pruebas de su apoyo a la máquina de guerra de Moscú mediante el suministro de componentes críticos.
Según un análisis de los datos aduaneros chinos realizado por la Carnegie Endowment for International Peace, Beijing exporta a Rusia bienes de doble uso (artículos con aplicaciones tanto civiles como militares) por valor de más de 300 millones de dólares al mes desde febrero de 2022, cuando el conflicto entre Rusia y Ucrania se intensificó hasta convertirse en una guerra total.
La presencia de combatientes chinos en Ucrania recuerda un desarrollo similar relacionado con Corea del Norte. Kiev dijo que Corea del Norte envió alrededor de 12,000 soldados a la región de Kursk, en Rusia, en 2024 para reforzar las líneas defensivas después de una ofensiva transfronteriza ucraniana.
En un informe de marzo, la inteligencia surcoreana estimó más de 4000 bajas entre las fuerzas desplegadas de Pyongyang, mientras que la inteligencia de defensa del Reino Unido situó el número total de bajas en más de 5000, con alrededor de un tercio muertos en combate.
A diferencia de los ciudadanos chinos capturados en territorio ucraniano, se informa que las tropas norcoreanas operan estrictamente en suelo ruso, particularmente en Kursk.
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