Elon Musk, uno de los principales asesores del presidente Donald Trump, dijo el miércoles que los empleados federales deberían esperar otro correo electrónico masivo después de una ronda inicial en la que se les pidió que respondieran a sus gerentes sobre lo que habían logrado la semana pasada.
En la primera reunión con su gabinete, Trump invitó a Musk—el jefe de su programa de reducción de costos conocido como Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE)—quien anunció que los trabajadores deberían esperar otro correo electrónico. Dijo que es parte de un intento por determinar si esos trabajadores siquiera existen.
"Vamos a enviar otro correo electrónico", dijo Musk.
Musk también dijo que el correo electrónico, en el que se pedía a los empleados que enumeraran cinco puntos que describieran lo que hicieron la semana pasada, era simplemente una "verificación del pulso" a la que cualquiera debería poder responder.
"Lo que estamos tratando de averiguar es que creemos que hay varias personas en la nómina que están muertas, lo que probablemente es la razón por la que no pueden responder... y algunas personas que no son personas reales... individuos ficticios que están cobrando cheques de pago", dijo Musk.
En la reunión, Trump volvió a decir que apoya el envío de correos electrónicos a los trabajadores federales.
Los correos electrónicos, dijo, son "una buena idea porque, ya saben, esas personas, como dije antes, están en la burbuja", lo que significa que están a punto de ser despedidas.
Durante el fin de semana pasado, mientras se enviaban los correos electrónicos, Musk escribió en su plataforma de redes sociales X que "no responder se tomará como una renuncia".
Su comentario y el correo electrónico provocaron una demanda a principios de esta semana por parte de un grupo de trabajadores federales y otras organizaciones.
Sin embargo, el correo electrónico enviado desde la Oficina de Administración de Personal (OPM) no decía nada sobre la posibilidad de que los empleados fueran despedidos por incumplimiento y solo pedía al trabajador que enumerara cinco cosas que había hecho durante la última semana.
La administración Trump, que ha ordenado a Musk y DOGE que trabajen con las agencias para recortar costos y hacer que el gobierno funcione de manera más eficiente, ha despedido a miles de trabajadores, principalmente individuos que están en estado de prueba, lo que generalmente significa que han estado en el trabajo durante un año o menos.
Para explicar el comentario de Musk, Trump dijo en una reunión en la Oficina Oval esta semana: "Lo que está haciendo es decir: ‘¿De verdad estás trabajando?’".
"Y luego, si no respondes, es como si estuvieras despedido parcialmente o si te hubieran despedido, porque mucha gente no responde porque ni siquiera existe", dijo.
A principios de esta semana, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, dijo que alrededor de un millón de empleados ya habían respondido al correo electrónico y que solo debería tomar unos minutos responder.
En respuesta al comentario de Musk sobre las renuncias, Leavitt dijo que los líderes de las agencias y departamentos "son responsables de su fuerza laboral específica", lo que "es cierto en lo que respecta a las contrataciones y despidos que han tenido lugar".
Musk reconoció en la reunión del Gabinete que su equipo había cometido algunos errores en sus intentos de reducir rápidamente la fuerza laboral federal y los programas gubernamentales. Mencionó que los esfuerzos de prevención del virus del Ébola se detuvieron mientras se realizaban recortes en la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
"Creo que todos queremos prevenir el ébola", afirmó. "Por eso restablecimos la prevención del ébola de inmediato y no hubo interrupciones. Pero debemos actuar con rapidez".
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