La UE impondrá aranceles compensatorios a productos de EE. UU. por valor de USD 28,000 millones

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, interviene durante un debate sobre medidas decisivas urgentes y un apoyo inquebrantable a Ucrania, en el marco de una sesión plenaria del Parlamento Europeo, en Estrasburgo, este de Francia, el 11 de marzo de 2025. (FREDERICK FLORIN/AFP vía Getty Images)La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, interviene durante un debate sobre medidas decisivas urgentes y un apoyo inquebrantable a Ucrania, en el marco de una sesión plenaria del Parlamento Europeo, en Estrasburgo, este de Francia, el 11 de marzo de 2025. (FREDERICK FLORIN/AFP vía Getty Images)
PrincipalesPor Owen Evans12 de marzo de 2025, 2:57 p. m.
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La Unión Europea respondió el 12 de marzo a los aranceles del presidente estadounidense Donald Trump apuntando a bienes estadounidenses por valor de 26,000 millones de euros (USD 28,000 millones) con contramedidas que entrarán en vigor el próximo mes.

La UE dijo que los aranceles se aplicarán al acero y al aluminio de grado industrial, así como a los productos de acero y aluminio semiacabados y terminados, incluidos bienes comerciales derivados que van desde piezas de maquinaria hasta agujas de tejer.

«Lamentamos el arancel injustificado del 25 por ciento de EE. UU. sobre las importaciones de acero y aluminio», dijo la Comisión de la UE en una publicación en la plataforma de redes sociales X. «Estamos lanzando contramedidas rápidas y proporcionadas por valor de hasta 26,000 millones de euros, que igualan el impacto económico de los aranceles de EE. UU.».

Los aranceles del 25 por ciento de Trump sobre todas las importaciones de acero y aluminio entraron en vigor poco después de la medianoche del 12 de marzo.

El presidente anunció el mes pasado que iba a introducir nuevas normas que exigían que el acero se «fundiera y vertiera» y el aluminio se «fundiera y moldeara» en Norteamérica para evitar que países como China eludieran las restricciones comerciales.

Trump dijo que el objetivo es evitar que otras naciones se aprovechen de Estados Unidos, reforzar la producción nacional y devolver los puestos de trabajo a la economía estadounidense.

«Esto es importante, es el comienzo de hacer que Estados Unidos vuelva a ser rico», dijo Trump a los periodistas en el Despacho Oval el 10 de febrero. «Nuestra nación requiere que el acero y el aluminio se fabriquen en Estados Unidos, no en países extranjeros».

Negociaciones

En una publicación del 12 de marzo en X, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo: «Lamentamos profundamente los aranceles estadounidenses impuestos a Europa».

Dijo que los aranceles son impuestos y «son malos para los negocios, y aún peores para los consumidores».

«Hoy Europa toma contramedidas fuertes pero proporcionadas», añadió. «Seguimos dispuestos a entablar un diálogo».

La Comisión Europea dijo que pondrá fin a su actual suspensión de los aranceles sobre los productos estadounidenses el 1 de abril y que sus aranceles estarán plenamente vigentes el 13 de abril.

El gobierno británico dijo que estaba decepcionado, pero no llegó a decir que impondría aranceles comerciales de represalia en respuesta a las medidas de EE. UU.

«Es decepcionante que EE. UU. haya impuesto hoy aranceles globales sobre el acero y el aluminio», dijo el miércoles el secretario de Comercio británico, Jonathan Reynolds. «Estamos centrados en un enfoque pragmático y estamos negociando rápidamente un acuerdo económico más amplio con EE. UU. para eliminar aranceles adicionales y beneficiar a las empresas del Reino Unido y a nuestra economía».

El sector siderúrgico del Reino Unido es pequeño, pero produce productos especializados para la defensa y otras industrias.

En un comunicado, el organismo comercial británico UK Steel dijo: «Estados Unidos es el segundo mercado de exportación de acero más importante del Reino Unido después de la UE, sobre todo porque es un mercado de alto valor».

El organismo comercial dijo que los aranceles «tendrán consecuencias enormemente perjudiciales para los proveedores del Reino Unido y sus clientes en Estados Unidos».

Estados Unidos es el segundo mercado de exportación de acero más importante de Gran Bretaña después de la UE, representando el 9 por ciento de las exportaciones de acero del Reino Unido en valor y el 7 por ciento en volumen, según UK Steel.

Canadá

El 10 de marzo, Trump dijo en Truth Social que aumentaría los aranceles sobre las importaciones canadienses de aluminio y acero al 50 por ciento.

El anuncio de Trump se produjo después de que el primer ministro de Ontario, Doug Ford, impusiera un recargo del 25 por ciento a las exportaciones de electricidad a algunos estados de EE. UU. y amenazara con cortarles el suministro eléctrico.

Tras una «conversación productiva sobre la relación económica» entre los vecinos norteamericanos con el secretario de Comercio, Howard Lutnick, Ford confirmó el 11 de marzo que suspendería el impuesto del 25 por ciento.

El martes, el asesor comercial de Trump, Peter Navarro, confirmó que los aranceles del 50 por ciento sobre el acero y el aluminio canadienses no entrarán en vigor el miércoles.

En su lugar, se impusieron los aranceles originales del 25 por ciento.

Philip K. Bell, presidente de la Asociación de Fabricantes de Acero, aplaudió los aranceles de Trump.

«El presidente Trump entiende que la industria siderúrgica estadounidense es la columna vertebral de nuestra economía», dijo en un comunicado el mes pasado. «Una industria siderúrgica nacional próspera es fundamental para la seguridad nacional, energética y económica de Estados Unidos».

La dirección internacional del sindicato United Steelworkers (USW) ofreció una respuesta ambigua.

Aunque el grupo apoya los esfuerzos de Trump para detener el exceso de capacidad mundial, desaprueba que se ataque a «socios comerciales de confianza, como Canadá».

«Nuestro sindicato acoge con satisfacción los esfuerzos del presidente Donald Trump para contener el exceso de capacidad mundial que durante demasiado tiempo ha permitido a los malos actores como China inundar el mercado mundial con sus productos comercializados de manera desleal, lo que ha dado lugar a un aumento de las importaciones en Estados Unidos, especialmente desde México», dijo el presidente internacional del USW, David McCall, en una declaración el 10 de febrero.

Andrew Moran contribuyó a este artículo

Con información de Reuters 


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