Una estudiante de la Universidad de Columbia presentó una demanda el 24 de marzo contra el presidente Donald Trump y altos funcionarios de la administración para bloquear cualquier posible intento de deportación por su participación en protestas pro-palestinas.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) describió dichas protestas como "pro-Hamás".
Yunseo Chung, de 21 años, quien se mudó de Corea del Sur a Estados Unidos con sus padres cuando tenía 7 años, presentó la demanda luego que le revocaran la residencia permanente.
La demanda afirma que Chung participó en protestas pro palestinas —desencadenadas por el conflicto en Gaza— en la Universidad de Columbia, pero no hizo declaraciones públicas ni desempeñó un papel destacado en ellas.
Tras la participación de Chung en una protesta sentada el 5 de marzo dentro de un edificio académico del Barnard College, el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York le emitió una citación de comparecencia ante la corte y la puso en libertad. La universidad la suspendió provisionalmente y le restringió el acceso tras el arresto.
Pocos días después, las autoridades federales se presentaron en casa de sus padres para buscarla y declararon que se le revocó su estatus legal. Un funcionario del ICE también emitió una orden de arresto administrativo contra Chung y registró su dormitorio, indica la demanda.
Según sus abogados, Chung no fue arrestada desde la sentada de protesta. En su demanda, Chung calificó las acciones de ICE como un "ataque sin precedentes e injustificable" a su Primera Enmienda y otros derechos.
Alegó que las acciones de ICE formaban parte de un "intento de represión por parte del gobierno estadounidense de las actividades de protesta y otras formas de expresión protegidas por la Constitución".
La demandante también acusó a los funcionarios de la administración Trump de intentar utilizar las medidas migratorias como una fuerza para reprimir expresiones que les desagradan, incluyendo el discurso de la Sra. Chung.
"Funcionarios de las más altas esferas del gobierno federal dejaron en claro que pretenden utilizar las medidas migratorias para castigar a los extranjeros que se manifiestan a favor de los palestinos y sus derechos, o que se percibe que participaron en tales expresiones", declaró en la demanda.
Un portavoz del DHS alegó que Chung incurrió en conductas preocupantes, incluyendo su arresto durante la sentada en Barnard College, que el DHS calificó de "pro-Hamás".
El portavoz del DHS no dio más detalles sobre la conducta en cuestión, pero afirmó que Chung fue "requerida para un proceso de deportación bajo las leyes de inmigración" y que tendrá la oportunidad de presentar su caso ante un juez de inmigración.
Los abogados de Chung presentaron una moción solicitando una orden de alejamiento temporal para evitar que Chung sea deportada o detenida mientras el caso legal está en curso.
El Comité de Abogados por los Derechos Civiles del Área de la Bahía de San Francisco (LCCRSF), que presentó la demanda y la moción en nombre de la estudiante, declaró que sin la orden de alejamiento, Chung podría enfrentar duras condiciones de detención que podrían causarle un trauma significativo, interrumpir sus estudios y limitar su acceso a asistencia legal.
"La expresión relativa al cambio político recibe el máximo nivel de protección bajo la Primera Enmienda, que la Corte Suprema interpreta desde hace casi un siglo como protectora de los no ciudadanos", declaró el LCCRSF en un comunicado.
The Epoch Times contactó a los abogados de Chung para obtener comentarios, pero no recibió respuesta al cierre de esta edición.
Las protestas estallaron en universidades de todo Estados Unidos, incluida la Universidad de Columbia, tras el ataque contra Israel, liderado por Hamás, el 7 de octubre de 2023, que impulsó al ejército israelí a lanzar una contraofensiva hacia los terroristas de Hamás en Gaza.
Trump emitió un comunicado en Truth Social a principios de este mes, advirtiendo que las universidades que permitieran "protestas ilegales" podrían arriesgarse a perder financiación federal. El presidente también afirmó que los estudiantes extranjeros que participaran en tales actividades podrían ser deportados.
"Los agitadores serán encarcelados o devueltos permanentemente a su país de origen. Los estudiantes estadounidenses serán expulsados permanentemente o, según el delito, arrestados", declaró Trump.
Con información de Tom Ozimek y Reuters.
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