La oficina de la Ley de Libertad de Información (FOIA) de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades fue completamente despedida como parte de la reorganización del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), confirmó un funcionario de salud el 2 de abril.
Algunos empleados de la oficina FOIA que trabajan en otras divisiones del HHS, incluidos los Institutos Nacionales de Salud, se encuentran entre las personas despedidas por el HHS esta semana.
Los despidos forman parte del plan de reestructuración del secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., destinado a agilizar las operaciones, dijo un funcionario del HHS a The Epoch Times.
Las distintas oficinas de FOIA no se comunicaban entre sí, ni informaban a su agencia matriz, el HHS, dijo el funcionario. En cambio, las oficinas "trabajaban cada una por su cuenta".
El plan es tomar el trabajo que realizaron las oficinas y centralizarlo en una sola oficina FOIA. El plan aún se está ultimando.
La FOIA es una ley federal que permite a periodistas y miembros del público solicitar y recibir información de agencias gubernamentales, incluidos correos electrónicos y documentos internos. Las respuestas arrojan luz sobre temas importantes. Los registros de los CDC producidos a través de la FOIA en los últimos años mostraron que los funcionarios de la agencia encontraron pruebas de que las vacunas contra el COVID-19 causaron muertes, vieron que hubo millones de casos de COVID-19 después de la vacunación al principio de la pandemia y por qué los funcionarios cambiaron la definición de vacuna.
Un empleado de los CDC dijo a The Epoch Times a través del portal FOIA de la agencia que toda la oficina FOIA de la agencia fue puesta en licencia administrativa.
Los correos electrónicos enviados a los empleados FOIA de los CDC fueron devueltos con mensajes automáticos.
Meredith Schlaifer, subdirectora de la Oficina del Comisionado de la División de Libertad de Información de la Sede de la Administración de Alimentos y Medicamentos, dijo a The Epoch Times en un correo electrónico que las nueve personas de su oficina siguen empleadas, pero que varios otros miembros del personal administrativo de la oficina FOIA fueron despedidos mediante una reducción de plantilla o un despido masivo.
La FDA se negó a hacer comentarios.
Los funcionarios de los Institutos Nacionales de Salud no respondieron a las preguntas.
Kennedy anunció el 27 de marzo que el HHS despediría a unos 10,000 trabajadores, además de otros 10,000 que han sido despedidos recientemente o han abandonado el departamento de salud. Kennedy también detalló una reorganización que incluye la consolidación de divisiones y la reducción del número de oficinas regionales.
Los despidos comenzaron esta semana.
Kennedy dijo el martes en la plataforma de redes sociales X que el proceso es difícil y que "nuestros corazones están con aquellos que han perdido sus trabajos", pero que los estadounidenses se han estado enfermando más cada año a pesar de los billones gastados por el HHS.
"Esta revisión trata de realinear el HHS con su misión principal: detener la epidemia de enfermedades crónicas y hacer que Estados Unidos vuelva a ser saludable", escribió. "Es beneficioso para los contribuyentes y para todos los estadounidenses a los que servimos".
Los críticos dicen que los despidos causarán daños.
"Recortar 10,000 puestos de trabajo críticos para la salud pública pone en riesgo a todos los estadounidenses, debilitando nuestras defensas contra brotes de enfermedades, medicamentos inseguros y alimentos contaminados", dijo Everett Kelley, presidente nacional del sindicato de la Federación Estadounidense de Empleados del Gobierno, en una declaración enviada por correo electrónico.
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