La secretaria de Educación, Linda McMahon, dijo el 23 de marzo que la Universidad de Columbia va en la dirección correcta en su objetivo de recuperar su financiación federal después de que la entidad aceptara implementar varios cambios de su política requeridos por la administración Trump.
En una entrevista con Dana Bash en el programa State of the Union de CNN el domingo, McMahon dijo que había mantenido «magníficas conversaciones» con la presidenta interina de la universidad, Katrina Armstrong.
«Ella dijo que sabía que era su responsabilidad garantizar la seguridad de los niños en su campus», dijo McMahon. «Quería asegurarse de que no hubiera ningún tipo de discriminación. Quería abordar cualquier problema sistemático que se identificara en relación con el antisemitismo en el campus».
La administración Trump anuló 400 millones de dólares en becas de investigación y otras ayudas a la Universidad de Columbia a principios de este mes argumentando la forma en que la universidad ha manejado las protestas pro-palestinas que criticaban la reacción militar de Israel ante el ataque terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023. Las autoridades federales exigieron nueve cambios individuales en las políticas académicas y de seguridad para devolver los fondos y enviar a la universidad millones de dólares más en subsidios en el futuro.
El viernes, Armstrong anunció que la Universidad de Columbia desplegaría una nueva supervisión para su departamento de estudios de Oriente Medio, y revisaría sus normas de protesta y disciplina estudiantil. Según un esquema general publicado en el sitio web de la universidad, Columbia también acordó implementar una nueva definición de antisemitismo y aumentar la «diversidad intelectual» contratando a más personas en su Instituto de Estudios Israelíes y Judíos.
Otros cambios incluyen prohibir a los estudiantes el uso de máscaras, a menos que sea por motivos de salud o religiosos, implementar un proceso revisado de reclutamiento y admisión, y una estricta supervisión administrativa por parte de un nuevo vicerrector encargado de monitorear ciertas especializaciones académicas.
Armstrong también dijo que la junta judicial de la escuela para disciplinar a los estudiantes estará conformada en el futuro por administradores y miembros de la facultad. Columbia aumentará su personal de seguridad pública para abordar mejor las situaciones disruptivas, agregó.
«Hemos trabajado duro para abordar las preocupaciones legítimas planteadas tanto desde dentro como fuera de nuestra comunidad de Columbia, incluso por nuestros reguladores, con respecto a la discriminación, el acoso y los actos antisemitas que ha sufrido nuestra comunidad judía a raíz del 7 de octubre de 2023», dice en un memorando de política.
Algunos profesores universitarios y grupos de libertad de expresión se opusieron a la decisión de Armstrong y acusaron a la universidad de ceder a la injerencia del gobierno en la libertad académica.
Bash preguntó a McMahon si la Universidad de Columbia había hecho lo suficiente para recuperar su financiación.
«Ahora vamos por buen camino para asegurarnos de que se realicen las negociaciones finales para desbloquear ese dinero», dijo.
Con información de Aaron Gifford y The Associated Press.
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