Los talibanes liberaron a un ciudadano estadounidense, George Glezmann, tras mantenerlo retenido en Afganistán durante años, dijo el jueves el secretario de Estado Marco Rubio.
"George estuvo detenido injustamente en Afganistán durante dos años y medio, pero ahora está en camino de reunirse con su esposa Aleksandra", escribió Rubio en un comunicado de prensa publicado en la plataforma de redes sociales X.
Glezmann, un mecánico de aviación de Atlanta, es el tercer detenido estadounidense liberado por los talibanes desde enero de este año. Fue capturado por los servicios de inteligencia de los talibanes en diciembre de 2022 y fue designado por el gobierno de EE. UU. como detenido injustamente al año siguiente.
Los talibanes, que tomaron el poder en Afganistán en 2021 después de que el ejército estadounidense se retirara del país tras dos décadas, no han hecho ninguna declaración pública sobre la liberación de Glezmann.
Zalmay Khalilzad, ex enviado de Estados Unidos a Afganistán e Irak, dijo que se había conseguido la liberación de Glezmann y que "está de camino a casa con su familia".
"Hoy es un buen día. Hemos conseguido la liberación de un ciudadano estadounidense... tras dos años de detención en Kabul. El gobierno talibán ha accedido a liberarlo como gesto de buena voluntad hacia [el presidente Donald Trump] y el pueblo estadounidense", escribió, y añadió que Trump "ha hecho de la libertad y el regreso a casa de los estadounidenses retenidos en el extranjero una alta prioridad".
En otra declaración, Rubio también dijo que Glezmann estaba de camino de vuelta a Estados Unidos para reunirse con su esposa y elogió al gobierno de Catar por su "firme compromiso y esfuerzos diplomáticos", que fueron "fundamentales para conseguir la liberación de George".
"La liberación de George es un paso positivo y constructivo. También es un recordatorio de que otros estadounidenses siguen detenidos en Afganistán. El presidente Trump continuará su incansable labor para liberar a TODOS los estadounidenses injustamente detenidos en todo el mundo", decía su declaración.
El 21 de enero, un día después de que Trump asumiera el cargo, los talibanes liberaron a los ciudadanos estadounidenses Ryan Corbett y William McKenty en un intercambio de prisioneros a cambio de una figura talibán encarcelada de por vida en California por cargos de tráfico de drogas y terrorismo. El Ministerio de Relaciones Exteriores de los talibanes en Kabul dijo que los dos ciudadanos estadounidenses habían sido intercambiados por Khan Mohammed, quien fue sentenciado a dos cadenas perpetuas en 2008.
"La Administración Trump seguirá exigiendo la liberación de todos los estadounidenses retenidos por los talibanes, especialmente a la luz de los miles de millones de dólares en ayuda estadounidense que han recibido en los últimos años", dijo en ese momento el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Brian Hughes, en un comunicado.
El mes pasado, el ciudadano estadounidense Marc Fogel fue liberado de una prisión rusa y aterrizó en la Base Conjunta Andrews, cerca de Washington, antes de reunirse con Trump. En ese momento, el presidente dijo a los periodistas que la liberación de Fogel era una "muestra de buena fe" por parte de Moscú en un intento por poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania.
"Rusia nos trató muy bien", dijo Trump. "De hecho, espero que sea el comienzo de una relación en la que podamos poner fin a esa guerra y millones de personas puedan dejar de morir".
A cambio, Estados Unidos liberó al ciudadano ruso Alexander Vinnik, que se declaró culpable de conspiración para cometer lavado de dinero a través de una plataforma de intercambio de criptomonedas, BTC-e, en 2024.
The Epoch Times se puso en contacto con el Departamento de Estado para obtener comentarios adicionales el jueves.
Con información de The Associated Press
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