WASHINGTON— Se espera que el presidente Donald Trump firme el jueves una orden ejecutiva que facilitará el desmantelamiento del Departamento de Educación de EE. UU., dando un paso hacia el cumplimiento de una promesa de campaña.
La orden, que se ha estado preparando durante semanas, se firmará en un acto en la Casa Blanca al que asistirán varios gobernadores republicanos y comisionados estatales de educación, según ha confirmado la Casa Blanca. El plan fue informado por primera vez por USA Today.
Trump ordenará a su recientemente confirmada secretaria de Educación, Linda McMahon, que tome todas las medidas necesarias para preparar el cierre del Departamento de Educación y transferir su autoridad a los estados, según una hoja informativa obtenida por The Epoch Times.
Según la hoja informativa, la orden también tiene como objetivo garantizar que, durante todo el proceso, no se produzcan interrupciones en la prestación de los servicios, programas y prestaciones de los que dependen los estadounidenses.
«La Orden también exige que los programas o actividades que reciban los fondos restantes del Departamento de Educación no promuevan la diversidad, equidad e inclusión (DEI) ni la ideología de género», afirma la hoja informativa.
El Departamento de Educación no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
McMahon, confirmada por el Senado el 3 de marzo, dijo en su primer mensaje a los empleados, titulado «La misión final de nuestro Departamento», que su «visión está alineada con la del presidente: devolver la educación a los estados».
Añadió: «Nuestro trabajo es respetar la voluntad del pueblo estadounidense y del presidente que eligieron, quien nos ha encomendado la tarea de lograr la eliminación de la burocracia aquí en el Departamento de Educación, una misión final trascendental, de manera rápida y responsable».
El Departamento de Educación emplea a unos 4240 trabajadores.
La forma actual del organismo se deriva de una ley de 1979 que lo independizó al separarlo del Departamento de Salud, Educación y Bienestar.
«El control del gobierno federal sobre la educación ha fallado a estudiantes, padres y profesores», decía la hoja informativa de la Casa Blanca.
«Desde su creación relativamente reciente en 1979, el Departamento de Educación, que no educa directamente a los estudiantes, ha gastado más de 3 billones de dólares sin mejorar el rendimiento de los estudiantes, medido por las puntuaciones estandarizadas de la Evaluación Nacional del Progreso Educativo (NAEP)».
Trump prometió durante la campaña electoral abolir el Departamento de Educación, alegando que es responsable de adoctrinar a la juventud estadounidense.
El 4 de febrero, Trump citó las clasificaciones mundiales que sitúan a Estados Unidos por detrás de muchos otros países, a pesar de ser el país que más gasta por estudiante. En ese momento sugirió que podría trabajar con el Congreso y los sindicatos de profesores para abolir la agencia, pero tampoco descartó la posibilidad de emitir una orden ejecutiva.
Esta es una noticia en desarrollo y se actualizará.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí