El presidente Donald Trump nombró el lunes a un grupo de sus aliados, entre ellos personalidades de los medios conservadores, legisladores republicanos y asesores de su primera administración, para las juntas de visitantes de las academias militares del país.
Las juntas directivas suelen estar compuestas por una combinación de personas designadas por el presidente y el Congreso. Supervisan y orientan la moral, las finanzas, el ámbito académico y la vida estudiantil en cada academia, que entrena al cuerpo de oficiales de la rama militar correspondiente.
En un posteo en su plataforma Truth Social, Trump anunció el nombramiento del ex asesor de seguridad nacional, el teniente general retirado Michael Flynn, para la junta de visitantes de la Academia Militar de los Estados Unidos, junto con el representante Wesley Hunt (R-Texas) y Maureen Bannon, ex alumna de West Point e hija del ex estratega de la Casa Blanca Steve Bannon.
La lista también incluye al ganador de la Medalla de Honor David Bellavia, al mayor general retirado Dan Walrath y a Meaghan Mobbs, graduada de West Point y activista conservadora.
"Harán que nuestro país se sienta orgulloso", escribió Trump. "¡Felicidades a todos!".
Trump también nombró al senador Tommy Tuberville (R-Ala.), al fundador de Turning Point USA, Charlie Kirk, al coronel retirado Doug Nikolai y a la ex asesora adjunta de seguridad nacional Dina Powell para la junta de visitantes de la Academia de la Fuerza Aérea.
Para la Academia Naval, el presidente nombró al senador Tim Sheehy (R-Mont.), al representante Ronny Jackson (R-Texas), al representante Derrick Van Orden (R-Wis.), al exsecretario de prensa de la Casa Blanca Sean Spicer, al exrepresentante Earl Ehrhart (R-Ga.), y a su asesor personal, Walt Nauta. Spicer formó parte de la junta de visitantes de la Academia Naval antes de que la administración Biden lo destituyera en 2021.
El mes pasado, Trump despidió a todos los miembros de las juntas de visitantes de las academias Naval, del Ejército, de la Fuerza Aérea y de la Guardia Costera como parte de un esfuerzo más amplio de su administración para reorientar al ejército estadounidense desde la defensa de causas sociales progresistas hacia su misión principal de prepararse para las guerras y ganarlas.
"Nuestras Academias Militares han sido infiltradas por ideólogos progresistas de la izquierda durante los últimos cuatro años", escribió Trump el 10 de febrero en una publicación en Truth Social. "Tendremos las Fuerzas Armadas más fuertes de la historia, y eso empieza por nombrar nuevos miembros a estas Juntas. ¡Debemos hacer que las Academias Militares vuelvan a ser GRANDES!".
Para implementar la visión del presidente para el ejército, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, ordenó en enero a su departamento eliminar las iniciativas y oficinas de diversidad, equidad e inclusión (DEI), incluido el cese de la práctica de considerar la raza o el sexo de una persona al admitir cadetes en academias militares.
El Pentágono ordenó recientemente que los militares y reclutas con disforia de género fueran apartados del ejército estadounidense. Un comunicado emitido por el departamento indicó que su búsqueda de altos estándares para los militares es incompatible con las restricciones médicas, quirúrgicas y de salud mental impuestas a las personas con antecedentes, diagnóstico o síntomas de disforia de género.
"Un principio fundamental del Departamento de Defensa debe ser siempre que los individuos más calificados sean ubicados en puestos de responsabilidad de acuerdo con políticas basadas en el mérito y sin distinción de color", escribió Hegseth en su memorando de enero.
"La misión del Departamento de Defensa es ganar las guerras de la nación", continuó. "Para lograrlo, necesitamos una fuerza de combate letal que recompense la iniciativa individual, la excelencia y el trabajo arduo basado en el mérito".
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