Estados Unidos necesita un resurgimiento general en el desarrollo de sus capacidades militares para combatir la creciente amenaza de la China comunista en el Indo-Pacífico, dijo el almirante Samuel Paparo, comandante del Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos, ante el Comité de Servicios Armados del Senado el 10 de abril.
«China está superando a Estados Unidos en capacidad aérea, de misiles, marítima y espacial, y está acelerando estas capacidades», dijo el almirante en su declaración de apertura. «Sigo confiando en nuestra postura de disuasión, pero la trayectoria debe cambiar».
«La iniciativa de disuasión en el Pacífico debería contrarrestar la amenaza de China invirtiendo en preparación y capacidad clave, lo que, de hecho, si se financia, promovería la intención de esta iniciativa y supondría una mejora importante de la postura. La disuasión sigue siendo nuestro deber más importante. Sin embargo, debe estar respaldada por la capacidad real de prevalecer en combate».
Los miembros del comité destacaron que el año pasado se dejó sin financiamiento prioridades del Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos por valor de 11,000 millones de dólares, y que las necesidades actuales de capacidad abarcan tierra, mar, aire y espacio, incluyendo más submarinos mejor equipados, personal, embarcaciones anfibias, destructores, portaaviones y aviones, especialmente transportes como el C-130. También se pidió la reapertura de bases militares a lo largo del Pacífico, como la de Adak, Alaska, y una nueva dedicación al arsenal nuclear de la nación como forma de disuasión.
La fuerza logística de combate se encuentra actualmente al 60% de lo que se requiere, 17 barcos están inactivos debido a la falta de personal y se ha tenido que contratar a terceros para equipos cruciales como los petroleros. La necesidad de la nación de incrementar la construcción de instalaciones navales, la diversificación de los transportes aéreos y marítimos y las opciones de petroleros también se encontraba en un nivel crítico.
El almirante también hizo hincapié en el papel que desempeñan los aliados de la región, como Japón, Corea del Sur y Australia, al aportar sus propias capacidades en ejercicios conjuntos con Estados Unidos, afirmando que las alianzas proporcionan una ventaja generacional. Sin embargo, dijo que cuanto más pudiera hacer Estados Unidos por sí solo para disuadir el conflicto mediante una demostración de fuerza, sería mejor.
«La disuasión debe estar respaldada por la capacidad real de luchar y ganar», dijo. «Los Estados Unidos de América disfrutan de ventajas clave en el espacio, el contraespacio, el mando y control entre la línea Karman y la superficie, y el dominio submarino, pero ese margen se está reduciendo, y debemos recuperarlo y aumentarlo».
Cuando se le preguntó qué es lo que más necesita y que no tiene en este momento, el almirante respondió que las capacidades de contrarrestar los sistemas de mando, control, computación, comunicaciones, cibernéticos, inteligencia, vigilancia, reconocimiento y selección de objetivos, lo que, según él, «mejoraría nuestra capacidad de cegar, engañar y destruir la capacidad del adversario para ver y sentir».
Su objetivo parecía ser infundir sostenibilidad estadounidense en la región, lo que coonsideró la razón por la que Estados Unidos pudo ganar la Segunda Guerra Mundial.
El almirante estaba acompañado por el general Xavier Brunson, comandante de las fuerzas de Estados Unidos, del Mando de Fuerzas Combinadas de Corea y del Mando de las Naciones Unidas, quien hizo hincapié en la necesidad no solo de mantener, sino de reforzar la presencia de Estados Unidos en Corea del Sur en medio de los rumores de que la actual administración se estaba preparando para retirar tropas de la península en un esfuerzo por reorientarse hacia China y proteger la patria estadounidense. Estados Unidos tiene actualmente más de 28,000 hombres y mujeres desplegados en Corea del Sur.
La audiencia se produce mientras el Ejército Popular de Liberación del Partido Comunista Chino (PCCh) se mantiene mostrando agresividad hacia Taiwán y Filipinas y participa en lo que los testigos denominaron cooperación simbiótica transaccional entre Rusia y Corea del Norte. A cambio de enviar piezas y chips necesarios para ayudar a Rusia en su lucha en Ucrania, dijeron, la China comunista podría esperar recibir ayuda con su flota de submarinos. Mientras tanto, el despliegue de tropas de Corea del Norte en Rusia podría ser a cambio de la modernización de sus capacidades de defensa aérea y quizás de la asistencia con sus misiles nucleares.
Los miembros del comité de ambos lados del pasillo parecieron aprovechar el momento para argumentar a favor o en contra de temas de política exterior actuales basados en cómo se relacionan con el dilema del PCCh.
El senador Rick Scott (R-Fla.) preguntó al almirante si un boicot de los Estados Unidos a los productos chinos afectaría o no a la capacidad del PCCh para reforzar sus fuerzas armadas, mientras que sus colegas demócratas, como el senador Tim Kaine (D-Va.) y la senadora Jeanne Shaheen (D-N.H.) preguntaron a los líderes militares cómo las acciones de la administración Trump sobre los aranceles, el retiro de Estados Unidos de la guerra en Ucrania y el recorte de fondos de Radio Free Asia y USAID podrían reforzar la confianza de la creciente alianza de tres naciones.
Ambos líderes militares se abstuvieron de hablar de política. Paparo declaró su apoyo a la labor de Estados Unidos de difundir información, declarando sobre China que «Dondequiera que ven un vacío, lo llenan, para confirmar más influencia en su propio poder nacional».
El almirante no llegó a confirmar abiertamente el peso real que el comercio estadounidense tuvo en el aumento militar del régimen comunista.
Otro miembro del comité preguntó por la importancia de Taiwán, y el almirante afirmó que, desde su punto de vista, debido a la posición de la isla en la economía mundial como proveedora de semiconductores, una guerra podría desencadenar otra Gran Depresión.
La absorción de Taiwán también aumentaría el dominio de China sobre la región, y el almirante no descartó la posibilidad de desatarse un conflicto adicional debido a que algunos de los aliados de Estados Unidos con capacidad nuclear en la región se niegan a someterse a China debido a tensiones históricas.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí